miércoles, 23 de noviembre de 2011

...y la continuación....


Seguimos en el parque, recogemos los bártulos y a por el chapuzón... buscamos una buena playa, un buen lago... ¿oye, qué calor, no?... observamos el ambiente... evaluamos la temperatura....exterior....
 la interior.....
 ¡¡¡¡¡¡¡y al agua patos!!!!!!!
 al final no hizo falta meterse con los pololos y la franela, estaba de vicio vicio, ya quisiéramos muchos días así en nuestra playita atlántica...
 ahí queda la prueba, a ver quién me puede decir que estuvo en Québec en pleno otoño y se pegó un chapuzón en uno de sus cientos de lagos.... jejejejjeje ¡de visio!
 

 y tan de vicio como estaba decidimos quedarnos un ratito sentadas en la orilla, disfrutando del paisaje, de los bichitos que intentaban ahogarse pero mi madrinita los salvaba y se volvían a ahogar (mmmmm ¿será que aquí los moscones bucean?....), ay mira una mariquita navegando en una hojita, qué simpática, un canoero que nos adelanta "qué coraje para estar ahí metidas en el agua con esas sonrisas así en bikini y sin congelaros", los primos patos que vienen a saludar y de paso a ver si pescan algo, las comparaciones siempre son odiosas, otra familia pato surcando los mares tranquilos del lago....
 y decidimos ir a tomar el sol, previa explicación de cómo tomamos el sol en España... siempre bieeeen orientados, cueste lo cueste, aunque haya que sacrificar las maravillosas vistas... peero en ese momento descubrimos la verdadera personalidad de nuestras antes queridas cucarachas...
¡ay! ah! ¡au! ¡tu m***! ¡argh! ¡uh! y demás improperios que no viene al caso, todo esto mientras sus majestades intentaban comernos, sí, sí, literalmente comernos, o si no a qué venía sentir cómo nos clavaban la dentadura... ¡su tía! ¡aaaaaaaayyyyyyyy!
y claro, así quedamos...
...hereuses de nuestra hazaña pero con el cuerpo carcomío, así que se acabó lo de ay mira qué bonitas... ¡¡¡¡grrrrrr es la guerra!!!! ale, de vuelta para la orilla... comida incluida....
 Poco duramos, todo hay que decir, una por el acoso coccinelle-til y otra porque llevábamos prisita para llegar a la super poutine casera, la mejor que te puedes echar al cuerpo al otro lado del río, en Saint-Hélene...
 ¡con slush de postre incluido! (algo así como un granizado, un poco más líquido, más colorido -como no-, más dulce pero muy típico):
 Saliendo del parque os tengo que explicar una cosa muy curiosa a la que no estamos acostumbrados... todos reconocemos el triángulo de bordes rojos con el animal o el avión avisándonos del peligro... pero, ¿qué haces cuando te encuentras con esto?:
 
 ¿peligro te puede saltar a la carretera un hombre camuflado debajo de una canoa?... o lo que es peor... mamá, mamá hoy me saltó un viandante-paseante armado con un bastón de apoyo a la carretera cuando iba tan tranquilo con mi bicicleta... jajajjajjajajaja había otro más, creo que era con un dibujo de una bicicleta.... jejejjejejeej pero noooo, tranquilos, es al revés... sólo es para que tengas cuidado de no llevarte ninguno de ellos por delante cuando pasas con el coche... ;D
...ya,ya..... y ¿este?
 mamá, mamá.........  no me esperes para cenar....... jejejejejejejejjejejejejej
Y para que veáis lo bien preparadito que tienen todo, zona de playa, embarque-desembarque de canoas, zona de merendero-barbacoa...
 ¡una chulada!
 
una copiándome la tésnica, si es que una no se puede despistar y ya están ahí.....
uno sin casco  jejejejjejejejeje, os los pongo de camuflaje porque ya aprendí que hay que tener cuidado con a quien se fotografía, que parece ser que aquí una Harley tiene connotaciones muuuy poderosas......
¿soy yo o nosotros no llevamos frases amenazadoras en los retrovisores?

"los objetos reflejados en un espejo están más cerca de lo que te crees"

entramos por una esquina, salimos por la opuesta...está usted saliendo del parque...parques de canadá les desea buen viaje ;D
  ala, hasta la próxima ;D

Chapuzón otoñal...

Creo que he encontrado el día perfecto para contaros una de mis aventurillas atrasadas que están deseando salir del baúl... hoy que comienza por fin el frío invernal (y mis québécoises dirán "esto no es ná!") y que apetece el calorcito de la maison...

Hace cosilla de un mes y pico, todavía sufriendo los últimos coletazos del verano pero con el invierno pidiendo paso (todo esto en pleno otoño de verdad), llegó uno de los fines de semana más esperados del año, el été indien. Os pongo en situación: otoño, pleno otoño, que no sabes si sacarte la chaqueta o ponértela, de repente llega el viernes (ese viernes tan deseado y tan odiado durante los meses estivales por esa manía atmosférica de estropearse justo en la tarde del viernes y dejarte sin playa todo el fin de semana...), anuncian bueno para el sábado, pero para el domingo calor de achicharre. ¡Esta es la nuestra! Mi madrinita que dice necesitar respirar aire puro y yo que digo necesitar meterme en el agua, pero no la de la ducha, no, la de verdad, la que casi no pisé en todo el verano (y que cuando estaba en los alpes me hacía ir a nadar a la piscina y hasta me hizo bucear por debajo del hielo... cuando no hay, una se agarra a lo que puede jeje). Así que puestas de acuerdo el domingo nos vamos al monte, bueno, adaptémonos al entorno... al parque natural a pasar el día, un poco de marcha por el monte y un buen baño nos sentará genial. Sí, sí, oís (leéis) bien, íbamos todas dispuestas a bañarnos, mes de octubre, región de Québec... momentos antes de partir hubo quien me dijo ni de coña, pero una, previsora, llevaba la muda lista por si al final el día no achicharraba tanto y era necesario meterse con ropa y todo...

Bocatas y mochileras listas, partimos temprano, que aún nos quedaban unas horitas por delante hasta llegar a destino: el Parc de la Mauricie. Un parque precioso, mucho más tangible que los que había visitado hasta ese momento (en este podías acercarte a los árboles, la vegetación e ¡incluso al pie de los lagos! ¡uuuhhh! -lo entenderéis en futuras aventurillas aún en el tintero...). La ruta hasta el parque ya prometía algo especial, y es que la carretera que te lleva hasta una de las entradas del parque va completamente paralela al río Saint-Maurice, aunque mi super conductora-guía-madrinita dice que por el otro lado del río aún es mejor, el que te lleva hasta la Tuque... apuntado queda para la próxima ;D
Y así cantando, cantando, bailando bailando llegamos al parque, pagamos religiosamente la entrada, malmiramos a toda la cola de coches que llevábamos delante y detrás (más que nada, porque buscábamos un poco de tranquilidad...) y ¡pa'dentro romerales! Todavía por aquellas fechas andábamos a vueltas con los colores del otoño, aunque qué contaros ahora, que ya conocéis la colorida gama verduril.... jejejjejjeje aún así impresiona ver los árboles cargados de hojas multicolores:
 
He de reconocer que las fotos no le hacían justicia, así que otra ruta más a añadir en vuestro carnet de viaje otoñal ;D ¡que no hay nada como verlo en persona!

Primera parada: randonée. Paseíllo de 2 km hasta el puente flotante (?¿)... ahí vamos...
 foto oficial y susto incluido.......
 
 
 seguimos bordeando el río Saint-Maurice y bajando hacía el puente flotante...
 
y aquí está el famoso puente... bueno, esta es la versión moderna del puente, con barandilla y todo, el antiguo está justo al lado, pero como la naturaleza siempre recupera lo que es suyo... pues está un poco camuflado pero está...
 
 
 
 y mientras admirábamos tan bellas vistas una simpática coccinelle vino a saludarnos... y parecía que no se quería ir...
 
 ay, aún recuerdo aquel momento en que consideraba mariquita como animal de compañía........ :S
 una pequeña reflexión antes de seguir.... jejejejjjejeje y mi pieíño con una compañía de lujo ;DDD
 ays, pero qué dura es la vida del senderista.... todo lo que baja hay que subirlo después.... jijijijijijijijijijijiji
 y ya de vuelta, pues cómo no con ayuda del bastón mágico... ais esta rodilla que me trae por la calle de la amargura.... :P
 pequeña sorpresa final...
 
totalmente interrumpida en medio del zampamiento monumental que se estaba pegando jijijijijij ;D
...continuará....
Licencia Creative Commons
canadá á jalleja por MBI se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 3.0 Unported.
Basada en una obra en canadaajalleja.blogspot.com.