¡A las buenas buenas! Hacía ya tiempo y era necesario volver a informar, que al final en vez de jallejos polo mundo iba a acabar con el lobatón de fondo... ¡así que aquí estoy de nuevo! ¡¡y vengo para quedarme!! y, ¿cómo sería la mejor manera de volver? con un momento mágico, como el que nos contaban hoy a la mañana que sólo sucede unas latitudes más abajo allá por donde las floridas.... pero eso es otro tema.... pues aquí está mi momento mágico..... visita al pueblo de Wendake, aldea de los Hurones Wendat.
A poca distancia del centro de Québec se encuentra este lugar mágico y con un encanto particular: calles tranquilas y a la vez cargadas de historia acogen al visitante que acierta a descubrirlas, sobre todo a pie, porque qué mejor manera de descubrir los detalles!!??
Empecé la visita como no podía ser, por la oficina de turismo (100, Bvd. Bastien - Wendake), en la que una antigua maestra hurona saltó rauda y veloz nada más verme cruzar el umbral de la puerta. Os recomiendo encarecidamente ir a visitarla porque no sólo os informará detalladamente de todo lo que no os podéis perder, sino que además es una mujer de mundo y, por lo menos, España la conoce ya de cabo a rabo jejejeje.
Siguiendo la recomendación de mi guía particular, el tour turístico comenzó descendiendo al río por detrás de la caseta de turismo (tras hacerle entender a la buena señora que no, no traía coche y sí iba a hacer el recorrido a pie....). Y después de los 162 escalones advertidos por la guía, ahí estaban las cataratas Kabir Kouba (http://www.chutekabirkouba.com/). Y también un simpático arqueólogo a todo trabajar en las excavaciones (en las que desafortunadamente no pude ver fósil alguno...).
¡Y qué lo digan, oiga! porque tanto preguntar por los paquetes turísticos que ofrece el museo Hurón-Wendat y claaaro, misma respuesta... es que llega usted fuera de temporada... así que visita comentada al museo y andando. Eso sí, a ver cuántos pueden decir que han hecho una visita museística all alone, sí, sí, el guía y tú mismo mismamente jeje. ¡Pues un placer la verdad! Y aún había más y es que la guía (de la cual ya sospechaba porque la vestimenta era un tanto especial) era nada más y nada menos que una reputada contadora de leyendas y cuentos tradicionales de los hurones de Wendat, Yolanda Okia Picard (de la que al final conseguí encontrar un ejemplar de su recopilación de leyendas...). Una encantadora mujer con la recorrí desde los inicios de la tierra gracias a la gran tortuga, hasta la modernidad más moderna a través de grandes artistas de la comunidad hurona de Wendat. Hay una cosa que queda clara tras recorrer su historia a través de todas las piezas que guardan en el museo, los hurones se han adaptado a todo lo que se les venía encima, incluso a esta modernidad acelerada que en muchos casos supone la pérdida de las costumbres, pero que gracias a la iniciativa de unos cuantos están volviendo a recuperar. Y sí, la forma de vestir de mi guía no era casual, es la adaptación moderna a los trajes típicos de su pueblo.
Como veis, del museo no hay ni la muestra de fotos, que está prohibido, así que tendréis que contentaros con ir reservando la fecha de vuestra visita ;D (página del museo). De lo que sí hay fotos es de la reproducción de una aldea hurona de la época para que todo hijo de vecino pueda satisfacer su curiosidad turistil...(Lugar tradicional hurón-wendat). La visita es un poco express de más porque en menos de media hora digieres tanta cantidad de datos, tradiciones y leyendas que más te vale atrapar la visita siguiente y repetir unas cuantas veces, pero vale la pena por lo menos para poder entender la forma de vida y las costumbres de los hurones wendat.
queda claro el toilete femenino, ¿no? |
¿y los servicios de comunicación? ;D |
"una sauna hurona" |
Después de fotografiar la aldea entera volví a la realidad urbana de la reserva, otra vez pateando pero contenta de la experiencia. Con casas de película de terror, de hangar conspirativo, de ensueño, de película familiar de domingo (uséase más terror).. y mi futura casa en la montaña...
...mi modelo... |
y el polígono industrial de la reserva. |
Así que ya de patear, pues nos vamos de excursión por el río Saint-Charles.........
jooooooo María que guay!
ResponderEliminarNo sabes cuanto me alegro, leyéndote me has transportado allí un poquito pero sobretodo he sentido cómo te lo pasastes! :)
Qué suerte lo de la mujer del punto de información y lo de la guía turística, ¡así da gusto!
bss
Bueno.....esto....no se si lo ves, pero CONTESTAME, no se ni por donde empezar.
ResponderEliminarAggg que envidia, sana, pero envidia.
Te nos vas a quedar en los huesos, dios que mal que se come por el mundo adelante, mira que lo pasamos mal los gallegos. Animo, siempre nos quedan las amburguesas de alce, y el doctor en Alasca, que un poquillo mas cerca que a nosotros te queda.
Engrasa los skis que poco puede faltar, jejeje, terminaras de nieve y frio hasta el culete.
Y no dejes de visitar a los vecinos yankis si tienes ocasion.
bicos
a las buenas!!!!! me dijeron que habías intentado escribir pero que no se publicaba, pero veo que la cosa va mejorando!!!!
ResponderEliminarpues la verdad se come faaaatal!! jajajjajaja que va, todo lo contrario!!! si lo mejor de todo es que sigo con la dieta atlántica adaptando el colorido verduril que se gastan por aquí!! y probando todo lo que se puede y más!!
la temporada... en fin... vamos a dejar el tema por ahora porque parece que este no va a ser el año de las nieves...y por aquí todos contentos...menos los europeos que ya andamos con la mosca detrás de la oreja pensando que tanto meternos miedo... pues no va a ser para tanto.... jejejjejjejeje
y lo de los vecinos...igual en vez de tirar pal sur...aparezco en el Yukon y de allí si que no hay retorno... ya se verá ya....
un besoteeeeeeee